Inmobiliaria Doblecé
Identidad, Naming. Inmobiliaria Doblecé.
Existen proyectos en los que la solución está a la vista antes de que comenzar a elaborar el briefing. Algunas veces ocurre que aparece entre la información un dato que por su relevancia se convierte en el ingrediente perfecto para construir una marca. Con Doblecé fue lo que ocurrió.
El gerente de esta joven inmobiliaria gallega necesitaba encontrar una solución a su presencia en el mercado inmobiliario, ya que carecía de un nombre comercial y una identidad que lo identificara con personalidad entre el maremagnum de nombres de agencias que cubren los paneles de ofertas de los portales webs y de los locales y pisos vacíos de la calle. Encontramos en su propio nombre y apellido una fórmula convincente para iniciar el proceso de naming. C+C es una doble ce, palabra que tiene el doble en sí misma. Un nombre que se visualiza al pronunciarlo.
El sector inmobiliario es un laberinto de ofertas en el que la eficacia de la imagen de marca es puerta de entrada a la confianza del cliente; Confianza, seriedad, cercanía, discreción y modernidad son valores que queríamos transmitir con esta identidad.
Las dos letras, frente a frente, dando forma a una puerta que se abre, es la metáfora visual que creamos para Doblecé. La gama cromática que fluye entre colores morados fue seleccionada por su elegante serenidad, valores que consideramos imprescindibles para una identidad que busca satisfacer necesidades muy concretas de negociación inmobiliaria.
El gerente de esta joven inmobiliaria gallega necesitaba encontrar una solución a su presencia en el mercado inmobiliario, ya que carecía de un nombre comercial y una identidad que lo identificara con personalidad entre el maremagnum de nombres de agencias que cubren los paneles de ofertas de los portales webs y de los locales y pisos vacíos de la calle. Encontramos en su propio nombre y apellido una fórmula convincente para iniciar el proceso de naming. C+C es una doble ce, palabra que tiene el doble en sí misma. Un nombre que se visualiza al pronunciarlo.
El sector inmobiliario es un laberinto de ofertas en el que la eficacia de la imagen de marca es puerta de entrada a la confianza del cliente; Confianza, seriedad, cercanía, discreción y modernidad son valores que queríamos transmitir con esta identidad.
Las dos letras, frente a frente, dando forma a una puerta que se abre, es la metáfora visual que creamos para Doblecé. La gama cromática que fluye entre colores morados fue seleccionada por su elegante serenidad, valores que consideramos imprescindibles para una identidad que busca satisfacer necesidades muy concretas de negociación inmobiliaria.
